Así será Fifa 18: Vuelve su Historia y se Busca el Tikitaka

Grupo E4 te cuenta sobre Fifa 18. Hay una eterna lucha en la industria del desarrollo de videojuegos por mejorar cada año los gráficos presentados en pantalla. Las compañías que se lo pueden permitir destinan ingentes cantidades de dinero en mejorarlos. Se busca, con ello, acercarse al mayor realismo posible, aunque todavía está lejos de ser totalmente perfectos. Pero los cambios que se producen son tan profundos que queremos pensar que más pronto que tarde la animación se confundirá plenamente con la vida real.

«Fifa 18», próxima entrega del videojuego de simulación de fútbol, tendrá unos gráficos más evolucionados que los del pasado año al volver a apostar por el motor gráfico Frostbite, tecnología utilizada por sagas de la compañía como Battlefield. A nivel técnico, se pondrá énfasis en el juego en equipo y, después de la buena acogida, volverá a disponer de un modo carrera, The Journey (El Camino), que protagonizará nuevamente el personaje de Alex Hunter, aunque con elementos personalizables para la ocasión como una de las escasas novedades esta temporada. En el segundo año del uso del motor gráfico se ha logrado dotar de mayor realismo», promete Samuel Rivera, productor del juego, durante la presentación del videojuego.

El videojuego promete un mayor realismo tanto en los rasgos faciales de los jugadores como sus movimientos, en un intento de replicar incluso el tipo de zancada, salto y gestos específicos de jugadores de la talla de Cristiano Ronaldo. Un equipo de Electronic Arts, empresa propietaria del juego, se desplazó a Madrid para capturar los movimientos del delantero del Real Madrid con el traje específico que utilizan los desarrolladores. El reto: presentar en pantalla hasta su último ápice de tracción muscular. En esta entrega, por ejemplo, se hará distinción al tamaño de cada jugador, ya que «corren de manera diferente» las personas de estatura más baja que las altas.

El resultado, según los primeros avances del proyecto, son óptimos y más avanzados que el pasado año. Si en la primera entrega en que apostaron por esta tecnología los gráficos «tenían más vida», en este segundo año del uso se ha logrado dotar de mayor realismo», aseguró. Para esta temporada se ha intentado que, además de todo ello, sea lo más «abierto» y «accesible» posible para llegar a todo tipo de públicos independientemente de su experiencia.

Porque en esta ocasión, todo ese esfuerzo dentro del juego se traslada en dos pilares: la personalización y la simulación. El primero es que en función de la estatura, la fisionomía y el tipo de jugador en la vida real, sus movimientos tanto en carrera como su comportamiento con o sin valor se mostrarán con mayor realismo en la pantalla. «Tiene unas animaciones más fluidas», explicó. También se ha optado por mejorar la llamada regionalización de los contenidos de tal forma que las animaciones de los diferentes estados, los clubes y la grada intentarán tener la personalidad y los cánticos que en la vida real.

Adaptativo y con más personalidad

El mensaje que trasladan los responsables del proyecto es que, pese a que este tipo de juegos que se lanzan anualmente y por esta razón no se puede esperar demasiadas revoluciones técnicas, en esta ocasión se ha puesto un esfuerzo mayor en mejorar la jugabilidad. Promete ser un salto cualitativo respecto a anteriores versiones. Y, para justificarlo, el videojuego se sustentará en varios pilares: la capacidad de respuesta («responsive» o adaptativo), la fluidez del control, la explosividad (con sensaciones más atléticas del jugador) y, por último, la personalidad y diferenciación de los jugadores. «Hay mucha personalidad de los futbolistas para que parezca más auténtico y divertido», insistió.

El videojuego tendrá un nuevo sistema de dribling para que el propio sistema que gestiona los movimientos devuelva «más respuestas» en la conducción del balón y se «ha incrementado la presión del golpeo», todo ello «para hacerlo más realista». De esta forma, el futbolista que sea un buen regateador se apreciará la diferencia, con lo que cuando esté disponible el videojuego se eliminará la uniformidad de los movimientos del conjunto de jugadores. También se ha puesto énfasis en la coordinación del equipo. El sistema informático intentará, por ejemplo, mantener la posición de cada jugador para que se abran más espacios o se produzcan nuevos desmarques. El reto es que el dibujo técnico quede plasmado en la pantalla y sirva, a su vez, «para leer el fútbol y saber cuándo anticipar la pelota».

El nuevo sistema de posicionamiento del jugador dará una nueva «sensación» en cada encuentro disputado. Las diferencias con los estilos de juegos de cada equipo serán «más aparentes» en aras de encauzar jugadas «más fluidas y espectaculares». De hecho, se introducirán cambios en las jugadas áreas, permitiendo por ejemplo que los centros largos no produzcan parábolas tan pronunciadas o se priorice la posibilidad, por ejemplo, de realizar voleas y tengan trayectorias más cercanas a la realidad.

Más juego en equipo

Todo ello, con el objetivo de hacer más juego bonito o, como diría el maestro de las retransmisiones, Andrés Montes, ya fallecido, apelar al «tikitaka». Al «jogo bonito», como se conoce en Brasil. El área defensiva, el sistema será más benévolo: intentará desplazar la pelota y no tanto chocar contra el rival. En lo que se refiere a esa inteligencia artificial adaptativa, los jugadores intentarán calcular mejor su actividad en torno al balón para buscar, con ello, respuestas acordes a cada situación, como por ejemplo buscando el desmarque, logrando mejores apoyos o, incluso, dando posibilidades para combinar jugadas y paredes.

Planificar cambios

Entre otros cambios introducidos en «Fifa 18» destacará que, por primera vez en la saga, se podrán hacer cambios de jugadores durante un partido de una manera más rápida y sin parar el período de tiempo. «Se pueden diseñar los propios cambios al principio o consultar información en tiempo real del jugador», sostuvo. Frente a la uniformidad de las animaciones en la estadios, en la próxima entrega se procurará que las celebraciones y reacciones en la grada serán más realistas. «La regionalización es fundamental para dotarle de esa ansiada personalidad», apuntó por su parte Matthew Prior, director creativo de «Fifa 18».

Nuevas opciones y personalización de su historia

Tras la «buena acogida» del modo historia el pasado año, Electronic Arts ha decidido mantener en la próxima entrega la presencia de un modo para un jugador en donde se podrá llevar a Alex Hunter como protagonista del paso de promesa a estrellas del fútbol, aunque se introducirán ligeras mejoras y nuevas opciones de personalización en su vestimenta y aspectos faciales, algo de lo carecía el pasado año. Habrá seis objetivos diferenciados y las conversaciones y respuestas en cada una de ellas influirán en la personalidad del personaje. Un aspecto interesante es que este modo también tendrá multijugador local.

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